"While you are experimenting, do not remain content with the surface of things. Don't become a mere recorder of facts, but try to penetrate the mystery of their origin."
--Isabel Allende Llona

9.2.10

La vida en círculos: Una reseña de Los amantes del círculo polar

¿Ud. podría contar su vida uniendo casualidades? ¿Opina Ud. que la vida ha nacido de nuestras decisiones, o hemos nacido de las opciones que la vida presenta a nosotros? ¿Es posible manipular su propio destino, o es el destino que siempre manipula a Usted? Para Julio Medem, el director de la película Los amantes del círculo polar, las dos posibilidades existen en armonía. La vida es un conjunto de círculos—una cadena de eventos, memorias, personas, y decisiones—todos independientes, pero a la vez juntos.
Contada desde el punto de vista primero de Ana y luego de Otto (y a veces los dos juntos), la película se enfoca en las vidas de los jóvenes que se encuentran por casualidad—una casualidad que los define para el resto de sus vidas. En un momento en que la muerte del padre de Ana y la separación de los padres de Otto habían creado lagunas en sus vidas, los dos niños encontraron el uno al otro y, al hacerlo, se llenaron los agujeros. Poco después, para completar la unión de sus vidas, la mamá de Ana y el papá de Otto se conocieron y se enamoraron. Esto provocó que los muchachos crecieran juntos—y la fascinación del uno con la otra rápidamente floreció en un amor secreto. Otto luego abandonó a su madre para vivir más cerca de Ana. Años llenos de felicidad habían pasado cuando un día Otto visitó la casa de su madre y la descubrió muerta. Otto sentía que él era culpable, y quería morir. Después de eso, Otto salió a vivir por su cuenta. Separados, las vidas de Ana y Otto progresaban, dejando al destino y a la esperanza de reunir. El resto de la película sigue las vidas de Ana y Otto mientras se desenvuelven sus destinos.
Pero la esencia de la película no se encuentra ni en un sólo personaje ni en una sola historia. Usando la estructura de la trama además de las decisiones de sus personajes y los acontecimientos que siguen, Medem explora la circularidad de la vida. La película está llena de círculos—en las imágenes, estructura, y además en los nombres de Ana y Otto, que son palíndromos. Del mismo modo, todo se interconecta en la película. Por ejemplo, la primera escena es también la escena final; las cosas como los accidentes de coche (evitados y mortales) y los aviones (verdaderos y de papel) ganan importancia durante la película. No podemos entender la significancia de los eventos o los símbolos sin unir las coincidencias, las casualidades.
La película también explora la filosofía de la vida. Para unos personajes, «[l]a vida está llena de estas cosas sin explicación.» Ellos no ven las conexiones y viven sus vidas buscando la satisfacción. Álvaro, el padre de Otto, no puede reconocer el amor que está en frente de él, en las formas de su esposa e hijo. Sigue buscando satisfacción en otras mujeres, como la madre de Ana. Como le dijo a Otto: «Así es la vida: implacable, alegre, y triste. Todo caduca con el tiempo. El amor también…» Esta incapacidad para disfrutar del amor causa su infelicidad por último. Irónicamente, la madre de Ana deja a Álvaro por otro hombre, y Álvaro ya tiene que vivir sólo.
También, la película exige que la audiencia mantenga su propio punto de vista. Aunque se narre la historia a través de múltiples puntos de vista, los resultados no son siempre iguales. Medem le presenta a la audiencia dos conclusiones: en una de ellas Ana y Otto se reúnen, completando el círculo; en la otra, Ana se ha muerto y ha dejado a Otto solo, completando el círculo de Otto con una mirada en los ojos de ella. El público es el factor decisivo en los destinos de los amantes. Así, la película no tiene un fin sin la audiencia. A través de la película, Medem nos invita a considerar la circularidad de nuestras vidas, con los temas de la fé, el tiempo, el amor, y el destino. Los amantes nos pregauntan: ¿Podría contar su vida uniendo casualidades?
Publicado en la edición de otoño de 2009 de Polyglot.
[Published in the 2009 Fall edition of Polyglot, Carnegie Mellon University's Undergraduate Journal of the Modern Languages Department]

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